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Ruta de la XIV Prueba MTB en Pareja.
Por Carlos Brea.
Si es cierto… a los MTBikers solo los detiene Dios.
A pesar de lo nublado y la advertencia de que nos hiciera partícipe nuestro amigo Francis (insaciable) García, de que hacia villa Mella estaba lloviendo, una docena de fiebruses del ciclo montañismo salimos a realizar la nueva ruta de la XIV edición de la Prueba en Pareja.
La salida desde el bellísimo Jardín Botánico fue a las 8:00am, puntual como siempre. Algunos percances siempre interesantes no se hicieron esperar: nunca hasta ese día había visto un aro de bici botando chispas cual braza, si así como lee! algunos argumentaron que quizás esto ocurría por las zapatillas de cerámica y los aros de aluminio, mientras otros no salíamos del asombro.
Retomamos el paseo y una ligerísima y agradable llovizna matutina nos acompaño gran parte del trayecto de la Av. Jacobo Majluta.
Pero que bárbaros… preferimos pasar por el trillo detrás del aeropuerto, a pesar de la lluvia y conociendo el lodo que allí se forma, que evadirlo por la calle al otro lado del aeropuerto, sorpresa!!!!! Estaba seco y el terreno firme, tanto que ni polvo levantamos al pasar.
Salvo tres pinches y algún que otro ligero retraso todo transcurrió a las mil maravillas.
Durante el trayecto de ida no se hicieron esperar los comentarios respecto de la ruta electa: “que si pocos tríllos y mucha calle”, “que si era para MTB o para ruta”, “que si al principio el badén es peligroso” y un moderado etc.
Las paradas, salvo por los pinches y las esperas para indicar el camino, fuero nulas hasta llegar al colmado del Aguacate donde reabastecimos y seguimos rumbo al vacacional Matua, cada uno con su respectiva paleta, al que solo le pasamos por el frente para proseguir hasta el portón cerca de La Cuava, donde nos encontramos con un nativo en posesión de una bici rarísima: con cuatro suspensiones, sin biela y sin ruedas (ver fotos).
El retorno por el trillo del portón nos ofreció un obstáculo poco transitado, la madre de las lomas del lugar, y una recompensa al ser vencido, un tremendo espectáculo visual en que nos deteníamos a admirar mientras nos recuperábamos, en seguida un agradable trillo se abría ante nosotros, prácticamente bajando “hasta mi casa” como dijo mi amigo Lomba, y es que retornar por ese trillo lleno de sombra, olores a cajuil, guayaba y guanábana, con tantos paisajes, y con rica variedad de bajadas (en tierra, en rocas sueltas, y en grandes peñascos) es un premio al esfuerzo de haber llegado hasta ahí.
Un río!! Un río!!! Exclamábamos al unísono… y papá Henk tan complaciente, diseño una ruta para retornar que incluia un refrescante chapuzón al tiempo que excluia gran parte del trillo técnico detrás del aeropuerto.
Una ultima parada en el colmado para luego salir a la carretera y un ritmo moderado, fueron las características del retorno cerca de las 2:30pm.
Datos técnicos
Salida: 8:00am
Lugar de salida: Jadirn Botánico
Cantidad de ciclistas: 12
Llegada al Vacacional Matua: cerca de las 11:30am
Llegada al Jardín Botánico: cerca de las 3:00pm
Distancia recorrida: 80km
Si es cierto… a los MTBikers solo los detiene Dios.
A pesar de lo nublado y la advertencia de que nos hiciera partícipe nuestro amigo Francis (insaciable) García, de que hacia villa Mella estaba lloviendo, una docena de fiebruses del ciclo montañismo salimos a realizar la nueva ruta de la XIV edición de la Prueba en Pareja.
La salida desde el bellísimo Jardín Botánico fue a las 8:00am, puntual como siempre. Algunos percances siempre interesantes no se hicieron esperar: nunca hasta ese día había visto un aro de bici botando chispas cual braza, si así como lee! algunos argumentaron que quizás esto ocurría por las zapatillas de cerámica y los aros de aluminio, mientras otros no salíamos del asombro.
Retomamos el paseo y una ligerísima y agradable llovizna matutina nos acompaño gran parte del trayecto de la Av. Jacobo Majluta.
Pero que bárbaros… preferimos pasar por el trillo detrás del aeropuerto, a pesar de la lluvia y conociendo el lodo que allí se forma, que evadirlo por la calle al otro lado del aeropuerto, sorpresa!!!!! Estaba seco y el terreno firme, tanto que ni polvo levantamos al pasar.
Salvo tres pinches y algún que otro ligero retraso todo transcurrió a las mil maravillas.
Durante el trayecto de ida no se hicieron esperar los comentarios respecto de la ruta electa: “que si pocos tríllos y mucha calle”, “que si era para MTB o para ruta”, “que si al principio el badén es peligroso” y un moderado etc.
Las paradas, salvo por los pinches y las esperas para indicar el camino, fuero nulas hasta llegar al colmado del Aguacate donde reabastecimos y seguimos rumbo al vacacional Matua, cada uno con su respectiva paleta, al que solo le pasamos por el frente para proseguir hasta el portón cerca de La Cuava, donde nos encontramos con un nativo en posesión de una bici rarísima: con cuatro suspensiones, sin biela y sin ruedas (ver fotos).
El retorno por el trillo del portón nos ofreció un obstáculo poco transitado, la madre de las lomas del lugar, y una recompensa al ser vencido, un tremendo espectáculo visual en que nos deteníamos a admirar mientras nos recuperábamos, en seguida un agradable trillo se abría ante nosotros, prácticamente bajando “hasta mi casa” como dijo mi amigo Lomba, y es que retornar por ese trillo lleno de sombra, olores a cajuil, guayaba y guanábana, con tantos paisajes, y con rica variedad de bajadas (en tierra, en rocas sueltas, y en grandes peñascos) es un premio al esfuerzo de haber llegado hasta ahí.
Un río!! Un río!!! Exclamábamos al unísono… y papá Henk tan complaciente, diseño una ruta para retornar que incluia un refrescante chapuzón al tiempo que excluia gran parte del trillo técnico detrás del aeropuerto.
Una ultima parada en el colmado para luego salir a la carretera y un ritmo moderado, fueron las características del retorno cerca de las 2:30pm.
Datos técnicos
Salida: 8:00am
Lugar de salida: Jadirn Botánico
Cantidad de ciclistas: 12
Llegada al Vacacional Matua: cerca de las 11:30am
Llegada al Jardín Botánico: cerca de las 3:00pm
Distancia recorrida: 80km
2 comentarios:
En el recorrido del jueves, ya saben por qué no participé. Me frustró verlos a todos en Planet Bike, estando yo de civil, aún con todos mis "queretos ciclísticos" en el carro, e incluso, la bicicleta.
En el del sábado estuve esperándolos 30 minutos a la salida del Parque Mirador Norte, luego avancé poco a poco hasta el Botánico, llevándome la gran sorpresa de que solo había un jeep CRV azul con rack, lo que me hizo pensar que el recorrido no se había dado. Aún así, avancé desde el Botánico hasta Higüero y cuando pasé por PropaGas vi vehículos con rack, como los de Chelín y Lomba, lo que me hizo saber que el lugar de salida había sido cambiado. Aún así... arranqué, hice el recorrido, siempre 40 minutos detrás del pelotón, no obstante, haberme enterado que la bici de Brea se había pinchado varias veces. Esto último me lo dijeron algunos nativos, a quienes le preguntaba. El ir al Botánico y el hacer el recorrido, sumado a que me fui pedaleando desde la casa, sumó 63 kilómetros en mi millero.
Francis Garcia
sr. Carlos Brea:
Cada dia admiro mas tu capacidad para reseñar los paseos que realizamos, tanto por el contenido jocoso, como tu imaginacion, pero se te olvido una cosa, que en las mayorias de las fotos atrapaban a nuestro querido amigo "Lomba" de Espalda y agachado, bueno......1 ,2, 3 4, cincomentarios
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