REPORTE DEL CONSUMIDOR.

Gary Fisher Paragon (Mark Weiss)

Por Carlos Brea.

Recientemente estuve navegando por algunas páginas relacionadas al MTB, me llamó la atención el descubrir que en los dos últimos años se ha estado poniendo muy de moda “lo retro”, volvieron las singlespeed!!! Aquellas bicis que antaño teníamos que apearnos para subir una cuesta cuando nuestras piernitas infantiles o adolescentes no tenían el poder que hoy día (hasta hay categoría abierta en las competencias para bici singlespeed).
(Parece involución… pues no lo es pues los conceptos de diseño para estas bicis están a la vanguardia del mercado y al nivel del más exigente ciclista.)
Pero en este navegar entre páginas de revistas algunas, tiendas otras y marcas de bicis, lo que más me llamó la atención fue la integración de las bicis con aros de 29 pulgadas.

Algunos de nosotros hemos tenido la oportunidad de montarnos en vehículos estándares (tracción delantera, v6, airbag, frenos ABS etc.) y cuando nos hemos montado en un vehiculo que supera esos estándares (tracción 4way, v12, control de suspensión etc.) sentimos la diferencia… pues me quise formar mi propia opinion y me fui a probar.
Algunas de las características de las que me pude percatar al montar esta joya recientemente fueron: gran manejabilidad en el plano y sobre terreno irregular, esta bici ofrece mucho control y estabilidad en las bajas y su comportamiento es muy dócil en maniobras complejas, pude comprobar que las subidas es su punto débil y sin embargo le lleva muchísima ventaja a la mayoría de las bicis aro 26” pues a pesar de que el terreno en que la probé estaba liso, enlodado, estaba lloviznando y estaba conduciendo agresivamente, ésta no derrapó en ningún momento, aquí es donde se ve que la distribución del peso del cuadro, de los componentes, y del ciclista sobre la bici son una clave esencial para el éxito de la Gary Fisher Paragon que es una bici rígida (hardtail), pero el volumen de aire y el área de contacto de la goma con el terreno ofrecen una sensación de confort que no puedo comparar con ninguna otra hardtail que haya montado.
Y para ser justo no puedo callarme las desventajas que percibí: cuando uno está acostumbrado a montar en una bici pesada (33Lb), de aros 26”, doble suspendida, con gomas w2.3”, y pasa a montar una bici que pesa 27Lb, aros de 29”, hardtail (rígida), gomas w2.0, y con apenas 80MM en la suspensión delantera y una geometría totalmente diferente el choque resulta fuerte, uno pasa un proceso de adaptación, lo primero que se siente es que uno está en un segundo nivel, (y a los bajos de estatura puede acercase cierto temor al vértigo) al estar más alto definitivamente el centro de gravedad (en física e ingeniería se llama centroide: es un punto virtual donde convergen las fuerzas y por lo tanto es neutro, si este punto es afectado se puede perder el estado de equilibrio de la estructura) está un poco más alto que en las bicis aro 26” lo que podría afectar en caso de tener que hacer muchas maniobras en una bajada muy empinada (usted hace muchas maniobras en bajadas muy empinadas??)
Pero a pesar de esto esta bici es para chuparse los dedos, al realizar esta prueba me dirigí al mirador sur e intencionalmente la sometí a toda clase de tortura que se me ocurría… incluso llegué a hacer maniobras que si las hago en una aro 26” me caigo fácilmente. Para que tenga una idea de a qué fue sometida esta bici aquí les cuento: empecé por asfalto (para adaptarme a la altura y a las reacciones de la bici), y rodar con ella junto a los ruteros fue pan comido, de inmediato a rodar sobre grama, tierra, grava, lodo, piedras, basura, y entre las raices de los arboles y debo decirles que con la Paragon es más facil pasar por encima a los obstáculos que esquibarlos… la prueba que considero más importante fue la de rodar sobre los trillos de hormigón dentro del mirador, que en esta época están llenos de limo y piñonates lo que hace muy peligroso la conducción y comprendí por que la bautizaron como “La Hummer”… agotado de darle piña a esta bici culminé la prueba con un “paseo de recuperacion” por la ciudad y por supuestos todos volteaban, en la zona colonial, para ver esta maravilla color sol perlado que se llama Gary Fisher Paragon 29ers.

Gracias a Planet Bike en Republica Dominicana en la persona de Rafael Poueriet por las facilidades prestadas.